top of page
Buscar
  • Foto del escritorZoltan VB

El atractivo innato del espacio intermedio

Actualizado: 8 feb 2018


Considerando el espacio intermedio no solo como una herramienta de producción arquitectónica, sino en el más amplio sentido de elemento de interacción social, este punto de conexión entre lugares o realidades diferentes siempre a funcionado como un imán para todo tipo de actividad social.


Las zonas fronterizas entre diferentes naciones en su punto de conexión, lejos de ser lugares asentados sobre un abismo imaginario, se han convierten en polos de atracción de la actividad comercial y el intercambio cultural. El lugar de intercambio entre dos naciones atrae numerosas actividades legales e ilegales y permite el intercambio de ideas o costumbres que en muchas ocasiones dan lugar a culturas o costumbres intermedias.


No solo las zonas terrestres ejercen este poder de atracción. Las zonas portuarias como punto de conexión entre mundos diferentes separados por la dilatada frontera que suponen los mares, han funcionado como lugares donde se acoge, donde se intercambia y que ataren a numerosas personas a su alrededor. Pero no solo el puerto, el mar en si mismo funciona como ese espacio intermedio, esa frontera dilatada en la que nuevamente a bordo de embarcaciones tiene lugar este espacio intermedio, un espacio entre las 2 costas en las que nuevamente se suceden numerosas actividades singulares y atractivas.


Pero no solo encontramos estos espacios en escalas de tanta magnitud. Si reducimos el ámbito al de la ciudad histórica, el punto de conexión que permitía el acceso desde el exterior al interior de la ciudad amurallada se convertía en un punto de sumo atractivo para numerosas actividades que así escapaban del cobro de aduanas al estar fuera del recinto. Esta situación creaba una dilatación entre la muralla y el exterior prolongando este espacio intermedio el recorrido del casco urbano.


Pero no solo los lugares meramente fronterizos ejercen este atractivo, la plaza nace como lugar de intercambio e interacción social a escala local, no separan, simplemente vertebran y atraen hacia su espacio el resto de la ciudad. Es el lugar donde la ciudad se encuentra con la ciudad suponiendo un espacio intermedio de gran atractivo entre esta y si misma.


Podemos reducir aún mas la escala a la del edificio, el porche, el zaguán, el patio… Hasta llegar a la misma vivienda en el que la sala de estar funciona como un punto intermedio entre el mundo exterior a la familia y las habitaciones, siendo el lugar donde se desarrolla la vida familiar y esta se relaciona, siendo el último punto de conexión entre la vida social y nuestra habitación como zona de confort más íntima.


El espacio intermedio no deja de ser un lugar donde abandonamos un cierto nivel de nuestra zona de confort, desde nuestro país a nuestra habitación para pasar a un lugar en el que interaccionamos de una forma u otra con la sociedad. El éxito de este espacio intermedio radica en que ofrece para facilitar este intercambio, como lo posibilita, lo vertebra, lo acoge… y a fin de cuentas, cuan atractivo es como para que abandonemos nuestra zona de confort.


10 visualizaciones0 comentarios

Entradas recientes

Ver todo
bottom of page